martes, 28 de febrero de 2017
Rab Laitman responde.
Pregunta:
Dentro del estrecho círculo familiar, una persona siente calidez y protección porque no hay ninguna lucha egoísta entre familiares ¿Qué sucedería si este círculo se expandiera y cubriera muchas personas no conectadas por lazos familiares?
Respuesta:
La fuerza positiva de la naturaleza será revelada entre esas personas. Si intentan mantener buenas relaciones, la fuerza oculta en la naturaleza será revelada. Habrá un lugar para que sea revelada porque querrán conectarse por encima de su egoísmo.
La distancia entre la fuerza de una conexión así y el egoísmo que la resiste será el lugar donde la fuerza positiva, anti egoísta de la naturaleza puede ser revelada.
Existen dos fuerzas en la naturaleza: la negativa que nos separa y la positiva que nos conecta. La fuerza positiva aparece si intentamos conectarnos. Nos convertimos en su detector, creando condiciones para su revelación.
La familia es un grupo demasiado pequeño, por lo tanto es difícil sentir la manifestación de esta fuerza en ella. Pero una tribu que une muchas familias proporciona un lugar para la revelación de la fuerza positiva de la naturaleza.
Abraham habló precisamente de esto en la antigua Babilonia hace 3500 años. Dijo que no teníamos otra opción sino unirnos a pesar del egoísmo que hizo erupción y la crisis social que causó y a pesar de los mutuos malentendidos, lo que llamamos la confusión del lenguaje.
Debemos elevarnos por encima de este malentendido, es decir, la aversión mutua, para que el amor cubra todas las transgresiones de nuestro egoísmo.
Si cubrimos el egoísmo con amor, descubriremos la fuerza buena oculta en la naturaleza al grado en que podamos superar nuestra inclinación malvada. El egoísmo crecerá más y más en todas las formas y figuras posibles y tendremos que sobreponernos cada vez más.
Después de todo, el mal es revelado sólo para que podamos conectarnos más fuertemente por encima de este y revelar la fuerza positiva incluso más hasta que sintamos que vivimos en un océano de bondad.
¿Y quién nos ayudó? Fue el mismo egoísmo malvado que estaba creciendo constantemente en nosotros. Y por tanto este es llamado “ayuda en contra”. Entonces nos encontramos en el mundo de absoluta bondad pero, este se construye por encima de nuestro egoísmo, por encima de las fuerzas malvadas. Ahora esas dos fuerzas comienzan a trabajar juntas, ayudándose mutuamente. La fuerza malvada ayuda a la fuerza buena en la cual vivimos.
Este método es llamado la sabiduría de la Cabalá, la cual nos enseña a usar correctamente el malvado egoísmo que se revela, cada vez elevándose por encima de este a través de la fuerza buena. Es imposible hacer esto solo, como está escrito “Ellos ayudaron a cada amigo suyo”.
Por lo tanto, debemos regresar a este amor fraterno en el que todos se sentían como una sola tribu.
Yehudah Ben Avi.